Como ya dije en mi presentación en el foro, no soy muy dado ha participar activamente en foros; pero creo, más bien sé, que ha llegado el momento de iniciarme en estas lides; os lo debo a los miembros del foro y en especial a alguno de vosotros.
Lo primero sera dar las gracias a Rodrigo, por sus generosas y desinteresadas iniciativas en favor de los niños necesitados.
Si, hoy presentare un cuchillo del sorteo pro-niños necesitados:
SORTEO DEL DIA 15 de enero de 2017 CABRITERO NASFIL ahora CARTOMASCUS.
Cuchillo realizado en acero12442 con 2,8 mm de grosor, cabo en boc Mallorquin, doble linea de fibra y pasadores de latón, funda en vaquetilla de 3,5 mm.
Un día visitando a Burgaty me comento que en el foro había en marcha un sorteo para recaudar dinero con la intención de ayudar a personas en dificultades, en especial a niños. Con el paso de los días el post se fue llenando con donaciones, en la lista de números cada vez quedaban menos libres, la cuenta atrás estaba próxima y los participantes cada vez más cerca de conseguir la pieza anhelada.
El día 16 de enero muy temprano entre en el foro, y aun no siendo una hora muy recomendable para llamar por teléfono, lo hice; llame a mi hijo, atropelladamente le dije:
“el cuchillo de Paco nos ha vuelto a tocar”.
-¿Que dices?
Que si, que si, nos ha tocado.
-¿Que nos ha tocado qué?
El cuchillo, el de Paco, el cabritero.
-No J…., que suerte.
Unas tres horas después recibo un mensaje:
-¿Con que lo estrenaremos?
Unos días después decidimos que no estaría nada mal estrenarlo con un muflón, la fecha, en primavera, una vez terminada la temporada y antes del celo de los corzos.
El viaje, como casi todos los de caza, padre e hijo hablando de casi todo, y especialmente de esos lances casi imposibles, con las anécdotas y vivencias de unos cuantos años de caza, de esos en los que el animal fue más listo que nosotros y solo lo vimos unos instantes y también de los fallos, de los que nos resulta aun imposible entender como se fue y uno de los de mis inicios, (siempre sale) que aunque mi padre ya no me lo recuerda, ahora es mi hijo quien lo hace.
La noche fue presagio de lo que por la mañana viviríamos, truenos y lluvia, una tormenta corta pero intensa; como intuíamos, los animales estaban muy movidos y sobretodo muy esquivos. No conseguimos ver un solo muflón macho que fuera merecedor de un rececho. La fortuna quiso que nos cruzáramos con una vieja hembra, nuestro amigo Javi susurro: “Adri sígueme”, con todo el sigilo posible se alejaron, yo observaba como animal y recechistas caminaban con pasos lentos y cortos hacia un encuentro que en esta ocasión se decanto del lado de los cazadores.
El cuchillo como ya dijo Paco en la presentación que hizo de él cuando lo dono corta mucho mucho, y retiene el filo.
Desde aquí dar las gracias a Gonzalo, a Rodrigo y muy especialmente a Paco.
Un abrazo, Avelino