En otro hilo, Jonhy adjunto un catalogo del 76 de Muela donde aparecían algunos cuchillos con unas tallas de ciervos en sus empuñaduras. Lo que implicaba un proceso artesanal en una producción industrial; aunque estas eran pequeñas, esquemáticas y muy naifs, y desde luego no pasarán a la historia cuchillera como un alarde artístico, si le conferían a las piezas una cierta gracia.
En este sentido, quiero recordar esta moda que se mantuvo durante varias décadas, y que incluso pasó a los cuchillos más económicos de plástico que imitaban el ciervo. Para ello voy a ayudarme con este cuchillo de Solingen, que tiene su empuñadura tallada sobre ciervo sámbar, con una hoja de vaciado plano, en acero carbono de 11,3 cm. El cuño me parece especialmente bonito; es la cabeza un idolillo que sostiene un largo cuchillo con los dientes, la cabeza y orejas está configuradas por las tetras: G O B. Lamentablemente no recuerdo al fabricante que corresponde.
¿Habrá, podríamos preguntarnos, alguna conexión entre estas formas estéticas? Por supuesto, la respuesta es que sí. La cuchillería europea siempre ha estado preñada de influencias que atravesaban las fronteras, y la cuchillería industrial de Solingen ha sido durante años inspiradora de la española. ¿Qué opináis vosotros?