Denominado cuchillo de supervivencia de la USAF años 50 y fabricado entre otros por Camillus u Ontario, os presento un ejemplar con el marcaje de éste último fabricante.
Buen cuchillo, de medidas contenidas, incorpora una sierra en el lomo, que si bien para rasgar el fuselaje de una aeronove, para cortar madera no resulta eficaz.
El conjunto acaba con una pequeña piedra de afilar.
Pese a los años en servicio y las variantes surgidas con posterioridad, todavía se sigue fabricando y puede verse en la actualidad en manos de sus usuarios.
Otro pequeño gran cuchillo en éste caso fabricado en los EEUU.

Un pequeño gran cuchillo,vi hacerle perrerias a uno y de todas salio ileso, solo con leves rozaduras en el parquerizado.
Disfrutalo.
Saludos de Rodrigo.

Un diseño perfectamente pensado para los fines en los que formó equipamiento.

Todo un Clásico con todas sus letras. Imprescindible en cualquier colección de cuchilleria militar, usado tanto por pilotos como por soldados de infantería. Y encima a un precio asequible.
Gracias por mostrar
Caryolg

Un verdadero clásico incombustible. Cuchillo completamente vigente en la actualidad (de la mano del modelo ASEK de la misma firma Ontario Knives, puesto que Camillus cerró), que sigue cumpliendo perfectamente con las funciones para las que fue diseñado hace décadas.
Es un cuchillo que está muy bien diseñado, económico y es un verdadero icono dentro del mundo militar, así como en el de la supervivencia, el preparacionismo, etc...
En USA se encuentra por poquísimo dinero.
Os muestro el mío, datado en mayo del 94.







Foto del actual... Un "revival" del genuino con materiales modernos.



Y aquí una comparación entre ambos:

Rommel escribió:
Vaya fondo de armario que me gasta usted, don Francisco, tela...!!!

Ya con poco más de veinte añitos moviendo colección...

Davy Crockett escribió:
Mi primera navaja me la regaló mi padre con 7 años, y fue confiscada por mi madre hasta los 13, y coleccionando como tal, empecé con 13 años. Y tengo 43...

Rommel escribió:

Nuestro padres nos regalaron a la misma edad, Paco, qué gracia. Yo me salvé de la confiscación porque escondía el Bowie de Payá en el altillo de mi armario...