Una de las glosas más emotivas que he leído sobre la navaja. Espero que os guste.
Éramos como la mayoría
una familia pobre, de artesanos.
Mi madre repartía la fuente del guisado por los platos.
El buen pan de La Roda mi padre hacía pedazos,
el pan grande en el pecho.La navaja en la mano.
Servía la navaja para todo; Para sacarle punta al tranco.
....para afilar el lápiz,
para el corcho rebelde,
para el tocino magro,
...para mondar naranjas,
para mojar la sopa en el caldo,
para pelar las patatas,
arreglar el gazapo,
cortar el nudo,
despegar la caja,
y poner un cartón a los zapatos.
Echar la sal al huevo,
y cortar a la vid el primer ramo.
Para pelar la vara del camino,
y poner nuestros nombres en un árbol.
¡Navaja de mi padre cuántas cosas hacías en su mano!
Cada feria veníamos padre e hijo cogidos de la mano.
Comíamos en "la Cuerda",
junto al carro con toldo de un paisano,
la merienda que madre preparaba.
Y después de los toros
padre compraba turrón blando,
que era el que ella quería.
Pero siempre el feriado
fue renovar la fiel navaja.
Años después
llevé yo solo el turrón blando.
Ahora ya se fueron los dos,
mas compro la navaja y me la guardo.
¡Quizá ésta Feria un hijo mío me compre una navaja de regalo!.